MOLDE PARA TARTAS CUADRADO

 

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Las clásicas tartas redondas están en crisis en los últimos años. No pasarán nunca de moda, eso está claro, pero cada vez las personas amantes de la cocina buscan nuevos desafíos, crear productos novedosos y diferentes, y llamar la atención de las personas que vayan a degustar el postre en concreto.

Si, hablamos de cambios culinarios como nunca antes los habíamos visto. La cocina es un arte y una de las habitaciones de la casa preferida por muchos.
Un lugar para disfrutar creando y elaborando comida y postres. Si quieres sorprender a los tuyos o crear un postre para una ocasión especial, lánzate a probar los moldes de tartas cuadrados que no dejarán indiferente a nadie.

De diferentes tamaños y colores, podrás escoger entre los que son desmontables y los que no. Tú decides qué molde adquirir según la idea o el plan que tengas en tu cabeza. El resto es solo disfrutar de tu cocina.

 

¿Por qué comprar moldes para tartas cuadrados?

Si, hablamos de cambios. La cocina es un arte y una de las habitaciones de la casa que a su vez es un taller. Un lugar para disfrutar creando y elaborando comidas y postres. Si quieres sorprender a los tuyos o crear un postre para una ocasión especial, lánzate a probar los moldes de tartas cuadrados que no dejarán indiferente a nadie. Las clásicas tartas redondas están en crisis en los últimos años. No pasarán nunca de moda, eso está claro, pero cada vez las personas amantes de la cocina buscan nuevos desafíos, crear productos novedosos y diferentes, y llamar la atención de las personas que vayan a degustar el postre en concreto.

De diferentes tamaños y colores, podrás escoger entre los que son desmontables y los que no. Tú decides qué molde adquirir según la idea o el plan que tengas en tu cabeza. El resto es solo disfrutar de tu cocina.

Claro, decirlo es fácil, pero ¿cómo reconocer cuándo son de calidad? Factores como la facilidad de la limpieza y del desmolado junto a características como si incluye accesorios son cosas que debes ver. Pero definitivamente la clave radicará en dos cuestiones simples: dimensiones y materiales.

Dimensiones:
Cuando hablo de dimensiones me refiero a lo grande o pequeño que quieras que sea tu tarta. Mientras que puedes conformarte con uno más alto o bajo, también puedes medirlos según su diámetro. Esto va a depender mucho de la cantidad de comensales para quienes será la tarta. Por ejemplo, un molde redondo de 20 cm de diámetro tiene una capacidad de 18 porciones. Mientras que uno rectangular del mismo diámetro sería para aproximadamente 22 porciones.

Materiales de fabricación:

La elección de los materiales es otro de los factores que tienden a confundir, sencillamente porque no sabemos para qué sirve cada uno de ellos o cuál es el que nos vendría mejor.

  • Acero inoxidable: encontrarás básicamente aros revestidos. Estos se usan con papel de parafina en el fondo. Son muy prácticos.
  • Aluminio fundido con revestimiento antiadherente: este material es común con molde cuadrado en forma de corona y diferentes formas es sus paredes y fondo.
  • Acero antiadherente: un material muy conocido en la cocina, es muy fácil de desmoldar, practico y está presente en muchas formas de moldes.
  • Silicona: son muy prácticos, ideales para tartas frías, aunque también para hornear.
  • Cerámica vitrificada: una opción nueva y aliada de la repostería casera. Es un material muy resistente, perfecto para distribuir bien el calor y se desmoldan muy fácil.

 

 

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Aunque no deberían, los precios y la disponibilidad pueden ser distintos a los publicados.